miércoles, 30 de marzo de 2011
entre que los días se cuentan por soles
lunes, 20 de diciembre de 2010
Ácido, en tres movimientos
martes, 10 de agosto de 2010
Insomnia
lunes, 9 de agosto de 2010
nigt
La media noche comienza a las tres de la madrugada
No hay Madrid, no hay Berkeley, no hay Oakland
La mitad de la noche sin embargo
Es igual que en todos lados
Nos cubre el silencio de lo más profundo
Y a una música de cañería que parece ser siempre de otro lado
No hay manera de detenerla
La noche no para, y dentro de muy poco será de día
Se convertirá en su opuesto
Se convertirá en las leyendas mayas y toltecas
En las historias chinas entre lo blanco y lo negro
Se transformará en otra cosa
Y la noche ya no será más noche
Nada será lo que era antes
Ni siquiera tú
Y mucho menos yo
vierneses
martes, 27 de julio de 2010
lunes, 26 de julio de 2010
Lo que necesito--pensaba--es que alguien me chupe los huevos y me diga que son de tamaño normal o más grandes. O que simplemente alguien me chupe los huevos y no me diga nada.
Tenía caspa en el pelo. Su ropa olía a miados y cagada. La barba le crecía mal y dispareja, su espalda era pequeña como la de una mujer, caminaba jorobado...
Pero un día--se decía--todo esto va a cambiar. Todo esto será diferente, y no tendré más problemas y todo mundo se podrá ir a reír de los huevos de alguien más.
Fue entonces cuando se le ocurrió la idea de esconderse en los baños públicos y, con tijeras de patio, cortarle los huevos a los cagones. Se metería dentro de la tubería, dentro del escusado, y desde ahí, como serpiente con dientes de tijera, tomaría su venganza.
sábado, 3 de julio de 2010
sábado, 26 de junio de 2010
lunes, 17 de mayo de 2010
Arroyo Seco Park
Dentro de todas las imágenes que le brotaban a la mente de los días pasados no había ninguna que se quedara más tiempo que el de cuatro segundos. Luego pasaban más imágenes que duraban menos aún. Todo esto resulta inutil, pensó mientras se enjabonaba los huevos y dejaba caer el chorro de agua por su espalda. Recordó por más tiempo la última vez que tuvo sexo, hacía tres días. ¿Será demasiado tiempo? No, no podía ser eso. En realidad no quería sexo en ese momento. Lo que quería era alguien con quien compartir su cama sin necesidad de tener erecciones en cada roze de piel. Lo que quería era una compañía que le dijera a la cara sin palabras que también le gustaba compartir su cama en silencio sin necesidad de sexo. Había visto suficientes mujeres durante el fin de semana buscando un amante con todos sus sentidos y a la vez huyendo de ellos cada que sospechaban que podían encontrarlo. Todas caían en el mismo agujero de la soberbia y el de querer llamar la atención sexual para después irse a dormir sintiendose deseadas. Se imaginó lejos de ahí. En Madrid, en Malasaña, en San Francisco, en South Beach.
Antes de apagar la regadera cerró completamente la llave del agua caliente y pensó en su amiga socióloga de la universidad. Si sólo pudiera venir un fin de semana a sacarlo de este lugar le estaría eternamente agradecido. ¿Por qué todas las mujeres que valen la pena están comprometidas o a miles de kilómetros de distancia? El agua seguía corriendo. Pensó en escribirle diciendo que si viene a visitarlo por unos días le compraría el boleto de regreso a Los Angeles. La recordó como la última vez que la vió, en su cumpleaños número veinticuatro en un bar de Korea Town y en la sala con chimenea de una casa cerca de Arroyo Seco Park.
Definitivamente eso haría en cuanto la cocaína y el mal humor lo abandonaran por completo. En realidad, se justificó, siempre le gustaron mucho más las intelectuales que las modelos.
reflexion sobre
Cuento de noche
tener a uno de los duenios politicos de la ciudad
frente a tu casa, con guaruras y matones
con armas automaticas protegiendo una casa,
vigilancia de la policia 24 horas al dia,
y que pase por ti un drug-dealer de cocaina
para pasear una vuelta a la cuadra y volverte a dejar
con los mil pesos de droga que recien has comprado.
viernes, 14 de mayo de 2010
Entumido Cómodamente
Entré al bar y pedí una cerveza obscura importada, inglesa, y esperé a mi amigo viendo un juego del Atlético de Madrid en la pantalla de alta definición que estaba encima de la barra del bar. Llegó mi amigo pero se fue rápidamente porque tenía cosas que hacer y dijo que necesitaba el tiempo para hacerlas. Ni siquiera pidió una cerveza. Habíamos llegado ahí porque otro amigo común le había llamado por radio para invitarlo a dicho bar, pero no había rastro de aquel amigo por ningún lugar, tampoco en su teléfono/radio, que siempre desviaba las llamadas que le hacíamos. Entonces me quedé solo viendo el partido europeo con mi cerveza obscura sintiéndome bien por el trabajo de la tarde y porque no parecía conocer a nadie en el bar ni nadie parecía conocerme.
Cuando iba a mitad de la cerveza entró nuestro amigo común con una chica alta y delgada, de cara no desagradable pero tampoco amena, con una especie de paliacate en la cabeza recogiéndole el cabello. Me la presentaron como Alejandra y me dio un beso casi en los labios mientras parecía actuar como diva de película. Mi amigo le hablaba en inglés, así que comencé a hacer lo mismo. Era de un pueblo-ciudad al norte de San Diego, casi llegando a Los Ángeles, y estaba en la ciudad porque estudiaba odontología, o algo así entendí. De cómo fue que conoció a mi amigo estuvieron involucradas algunas tías de alguien, pero parecía una historia un poco fuera de contexto. No le di mucha importancia y me quedé platicando con ella bebiendo mi cerveza mientras mi amigo se fue a hablar por teléfono a una esquina del bar (probablemente con otra Alejandra). Ella pidió una Heineken después de no poder pedir una Stella Artois. Las cervezas italianas no son muy buenas, le dije en inglés, y en ese sentido las cervezas mediterráneas tampoco son buenas casi por regla general. A ella no pareció importarle mi comentario y me dio un beso con la punta de los labios. Como no supe que contestar seguí bebiendo y volteé alrededor buscando a mi amigo, quien seguía hablando desde la esquina.
Sentí una mano de mujer en la espalda cuando me saludó una amiga que acababa de reconocerme. No te habíamos visto, me dijo, estábamos ahí la Jimena y yo preguntándonos si eras o no tú el de la barra. Nos saludamos de beso en la mejilla. Le dije que en efecto era yo el que estaba ahí en la barra. Jimena me decía que tú eras en realidad más alto, pero yo le dije que no, que sí tenías que ser tú. Volteé a ver su mesa y vi a Jimena saludándome mientras tres tipos sin importante apariencia platicaban entre ellos en la misma mesa de Jimena. Mi amiga pidió una cerveza barata y me dijo que en realidad ya se quería ir y que estaba cansada. Yo le dije que en efecto yo también estaba cansado, y que como no tenía toalla me bañaría y me metería sin ropa debajo de las cobijas para dormir. A ella le pareció gracioso y me recomendó secarme con mi ropa sucia. Luego llegó Jimena y me saludó. Fue un momento gracioso porque durante quince segundos estuve con una mujer en cada mano, y, a decir verdad, son muy guapas estas dos amigas. Luego como las dos me hablaban al mismo tiempo y a diferentes oídos y yo mantenía mis manos en ambas cinturas me imaginé la escena desde fuera y no pude contener una pequeña sonrisa que no expliqué a nadie y que seguro se pensó que era a base de algún comentario de ellas. La verdad es que no recuerdo qué me decían. Pidieron sus cervezas y se regresaron a su mesa. Me volví con Alejandra y la vi bailarle un poco a mi amigo. Me acabé la cerveza y la puse sobre la barra. Me despedí de mi amigo y de Alejandra mientras como música de fondo un empleado del bar, que también es vocalista de una banda de rock-pesado-metal de la vieja escuela, cantaba y tocaba la canción de Michelle, de Los Beatles, con solo una guitarra eléctrica y sin distorción. Lo saludé desde lejos diciéndole con el dedo pulgar que me gustaba el performance, me despedí de Jimena y mi otra amiga y salí de ahí. De suerte el guardia de seguridad me regalo un cigarrillo y comencé a caminar de regreso a mi departamento.
Pasé por un lote baldío en donde un pastor alemán ladraba sin parar, pasé por unas florerías, una farmacia y por un carrito de hot-dogs que no son para nada buenos. No llevaba calcetines debajo de los tenis y el cigarrillo se iba consumiendo rápidamente. Casi al llegar al semáforo de Reforma y Calle México se me antojó otra cerveza y también se me antojó ver a alguna mujer desnuda. Traía dinero todavía del premio literario que poco a poco se va consumiendo (muy lentamente, con breves excepciones de despilfarros monetarios a las tres de la mañana). Entré al mejor congal de los cuatro que están a menos de veinte metros de distancia uno del otro. Pagué un cover de 40 pesos y me dieron un boleto que entregué al bartender por una cerveza barata, sin la posibilidad de cambiarla por un trago de whiskey. En la pista bailaba una mujer grande, con tetas masivas y con un culo lleno de cicatrices, también bastante grande. Me senté en una mesa al lado de la pista, con una silla de distancia entre yo y el escenario. Se me puso un poco dura con ciertas posiciones que hacía la muchacha tetona frente a los tipos que sí le daban dinero. Yo me divertía viéndola a ella divertirse recibiendo pequeñas lluvias de billetes de un dólar y me reía de los comentarios que el presentador hacía desde su cabina.
Me quedé ahí sentado durante dos bailarinas más. El lugar estaba solitario, y se quedó aún más solo cuando los dos grupos de amigos que aventaban billetes a la pista se fueron. Vi pasar a algunas strippers con los senos de fuera y en tanga, pero no había mucho tráfico de nada. Mientras tanto veía la mejor suerte del grupo que tenía en su mesa sentadas a cuatro muchachas. Una vestida de negro con una camisa que le cubría solo la mitad de las tetas, otra vestida de rojo que mostraba los senos en cada oportunidad que tenía, una de blanco que bailaba salsa con uno de los hombres (clase media trabajadora del tipo burócrata de alrededor cuarenta años todos ellos), y una última que no pude ver bien por estar sentada en medio de varios.
Con el final de mi cerveza subió al escenario una mujer chaparra de tetas grandes operadas que comenzó a bailar una canción de Enrique Iglesias. Uno de sus pezones erguidos atravesaba el vestido negro de red que tenía puesto. A mí ese pezón me tenía casi hipnotizado. La canción terminó y el presentador la nombró varias veces por su nombre artístico. Ahora solo quedaba yo en las sillas que están alrededor de la pista con los dos tubos. La mujer se vio en los espejos un par de veces y se preparó para quitarse la ropa con la siguiente canción. Era Pink Floyd, con la de Comfortably Numb.
martes, 4 de mayo de 2010
Porque sin ella la paga no vale nada
Busco el oro blanco que dicen es de diferentes colores
Lo unico que sé que es cierto
Es que todo viene desde muy adentro de la tierra
Y la catedral de Puebla por dentro me mira ella
En acción de cómo me fusiono yo con mi tesoro
E Ignacio Zaragoza desde afuera tambien nos mira
Y nos dirije haciendo un guiño medio de pijo
Y medio de gachupín vuelto mexica y nacido negro:
Siempre quizo ser hombre blanco
Y hablar con lengua de serpiente.
domingo, 2 de mayo de 2010
Carolyn y La buena vida.
Yo la miraba usar su sombrero de paja comprado en Santa Rosalía a una mujer indígena de menos de metro y medio de estatura, la miraba con sus lentes de sol a la moda y su pelo claro, le miraba el escote y le miraba las piernas, y me enojaba el simple hecho de verla. Acabamos así porque en realidad nunca empezamos bien. Nos dijimos mentiras mutuamente desde el principio y salimos a la carretera sin pensarlo dos veces. Teníamos un mes juntos hasta hacía dos días; en realidad no recuerdo qué pasó, seguramente una estupidez. Sin lugar a donde huir individualmente seguimos la carretera. La mujer de treinta años y ojos tristes prendió el comal y puso a calentar carne sobre aceite vegetal. Son pareja, preguntó. Ni Carolyn ni yo contestamos. Parecen casados, insitió la mujer. Qué dijo, me preguntó Carolyn. Piensa que estamos casados, le dije. Carolyn me sonrió y luego le sonrió a la mujer. Quería quitarle su sombrero de paja y sus lentes y tirarla de su cabello claro hasta que alguien de los dos muriera o se acabara el mundo. No, le contesté a la mujer, no estamos casados.
Carolyn pareció interesarse en lo que estaba sucediendo y me preguntó qué decía la mujer. Le dije lo que habia contestado. Carolyn la volvió a ver y volvió a sonreirle. Luego volteó a verme. Mientras me servía agua caliente para tomar café instantaneo ví que Carolyn empezaba a arreglarse el cabello. No crees que soy bonita, me preguntó. No me jodas, le dije. Ella como si nada volvió a sonreirle a la mujer, quien inmediatamente después volvió a hablar. Si que están casados, dijo viéndome, ¿de dónde es la muchacha? Quize reír. Te preguntan de dónde eres, le dije a Carolyn, quien mostró gran curiosidad en la pregunta. Um, San Francisco, dijo, y me sonrió, como sabiendo (¡claro que sabía!) que me encanta traerla a estos pueblos desiertos de todo y en medio de nada al lado del mar y tenerla donde fuera y como fuese. Me veía como diciendo, mira, cabrón, a quien tienes aquí, y tu por pendejo no haces nada. Le dí un trago al café instantaneo y volví a la barra. Casi enciendo un cigarrillo pero me detuve cuando la mujer de treinta años nos sirvió los platos.
Comimos en silencio mientras la cocinera hablaba de lo feo que estaba el pueblo y de lo mucho que le gustaría irse a otro lado. Al otro lado, decía, especialmente a San Diego, por lo bonito y por lo límpio, porque una vez había ido para allá, de niña, con su escuela, a ver el zoológico, pero eran otros tiempos, decía, y hablaba de un parque muy grande y muy verde que estaba cerca del zoológico. Traté de no prestarle atención a la mujer. En eso entró un señor veinte años más viejo que la cocinera y le sonrió burdamente. Como está hoy, preguntó el hombre. Bien, y usted, respondió ella por cortesía. Pues más o menos, dijo él, es que a mi se me hace que me falta algo, no se bien qué, siguió con un tono de voz chingaquedito, a lo mejor usté sabe. A la mujer no le hizo nada de gracia el juego del tipo. Carolyn se levantó de su silla para servirse café y apoyó su pecho sobre mi espalda cuando pasó a llenar su vaso con agua caliente. Permanecí inmovil al sentir sus senos y seguí en lo mío. Traté de no pensar en nada aunque fuera imposible. El hombre pidió una Coca-Cola y siguió molestando a la mujer, quien quería salirse de la conversación a como diera lugar, sin éxito, ya que el hombre tenía respuesta para todo.
Salimos de la lonchería rumbo al carro y cada quien encendió un cigarrillo. Qué le dijiste a la mujer, preguntó Carolyn, relajada. Vi su cara y sus ojos claros através de los lentes de sol, se había vuelto a poner el sombrero de paja. Que te rapté contra tu voluntad hace unos meses, dije, pero que me había salido mal el plan porque te habías enamorado, y que ahora tengo que comprarte comida cada vez que tienes hambre. La primera broma en mucho tiempo, estúpida, lo sé, pero uno no se da mucha cuenta de lo que dice la mayor parte del tiempo. Eres un mentiroso, me dijo mientras daba una calada al cigarrillo, nunca he estado enamorada de ti, ni siquiera cuando te lo he dicho. Ya lo se, contesté, por eso me importas un carajo. Eres un tonto, volvió a decir resuelta y viéndome a los ojos mientras bajaba sus lentes de sol a la moda solamente lo justo para vernos sin filtros ultravioleta. Antes de llegar al próximo estúpido pueblo, dijo convencida, te voy a dar una mamada que te va a dejar sin nada dentro.
Sobre absolutamente todo
Son dificiles cuando no te tengo
Y aveces son más duras cuando estás aquí
Porque en ese momento no solo no me comprendo
Si no que no nos comprendo
Y la duda se vuelve de los dos.
Hay alcantarillas más limpias que tu
Y que yo
No se si lo sepas ya
Pero por si no te lo digo ahora:
Empapados de mierda estamos
Con cada grito de placer que haces
Y con cada grito de dolor,
Con cada verso que te digo
Y en cada vez que me voy.
Bar Rocco
Reflexion 2 de abril 28
Reflexion de abril 28
miércoles, 7 de abril de 2010
viernes, 27 de junio de 2008
miércoles, 18 de junio de 2008
y si no tengo la llave para abrir a mis demonios
Si me quieres poner en tu boca
y si nadie se inca ni pide perdon
como nos convertimos en aliento entonces?
como respiro donde no estan mis pulmones?
Eres una pendeja porque no ves lo que hago
Soy un miedoso por no decirte en realidad lo que te quiero.
Hoy vi a una pareja agarrada de la mano
me acorde de mi mismo y mire su futuro
quize matarlos,
hacerlos pedazos al sol
La vida pudiera ser menos intensta...menos complicada
Llevo en mi espalda una condena de seguir pensando
Me levanto al espejo y me levanto solitario
Solo un conio me salva aveces y de vez en cuando
alli metido desnudo y tibio no hay dolor
y ahi junto a tu vientre nada es confuso,
tu eres el mundo
Escuchame mi amor
no quiero hacerte danio
pero si no hay opcion no tendre mas remedio,
te observare en el silencio
lunes, 16 de junio de 2008
domingo, 8 de junio de 2008
Prestame atención
Te voy a decir la verdad
esa que es tuya y tambien es mía
Primero que nada mirame
Ahora bien, escuchame
Que esta es la unica oportunidad que tienes para vivir deprisa y morir más veces.
Esta es nuestra decisión colectiva
Ya me oiste, no es tuya y no es mia
Olvidate de tu novio pendejo
Dale la espalda a toda esta poesia inservible
Pon atención a la musica de la vida
Y mirame,
Mirame, mirame…
Y que bueno está este tabaco
Que buena música
Y que buena mujer eres.
Así paso las noches
En solitario como pendejo
Y acompañado como miedoso
Tomando cerveza y fumando un cigarrillo
Viendote pasar
Desnuda frente a mi sobre mi alfombra
Sin decirte nada
Sin querer detenerte
Pensando en el inmediato futuro
En el que pasaré por tus senos de leche.
Aveces me llegan muchas dudas
Sobre absolutamente todo
Son dificiles cuando no te tengo
Y aveces son más cuando estás aquí
Porque en ese momento no solo no me comprendo
Si no no nos comprendo
Y la duda se vuelve dos.
Hay alcantarillas más limpias que tu y yo
No se si lo sepas ya
Pero por si no te lo digo ahora:
Empapados de mierda estamos
Con cada grito de placer que haces
Y con cada grito de dolor
Con cada verso que te digo
Y en cada vez que me voy.
domingo, 1 de junio de 2008
Yo deveria de estar afuera.
No se, haciendo cualquier cosa.
Eyaculando sobre alguien.
Destrozando alguna cara:
Que alguien me destroze la cara a mi.
Cualquier cosa,
¿qué importa a estas horas y con este vino barato encima?
Un coño.
O dos, o tres.
Mis recuerdos de noche son pendejadas,
son hechos y es pasado.
No me lamento y esta noche busco un hueco donde caer
Porque no tengo donde dormir, mucho menos donde vivir
En este madrid frio y de lluvia
Yo que habia pensado que iba a llegar en primavera
Con flores floreciendo y minifaldas en muchachas
Con su pelo suelto y sus sonrisas españolas.
Con nada me encuentro,
Una maestra canadiense de flamenco
Que vino un mes a esta ciudad para capacitarse y regresar a Ottawa,
Y sí, me la cojí,
Varias veces en la misma noche
Varias veces en el mismo dia
Y si tenía quince años más que yo
Y si me la mamo estupendamente,
Pero que jodido me siento hoy,
Esta noche en el Bukowsky Club.
jueves, 29 de mayo de 2008
podia cobrar hasta trecientos dólares por una sesión (tiempo indefinido) sin tener sexo
April tambien era la novia de Daniel
la conocí sólo dos veces
una cuando me la presentó Daniel en la cocina
y otra cuando me dió un beso y me pidió que la violara,
pensé un poco y terminé consintiendola a golpes, moretes y mordidas
por eso la odié
porque cómo podía la muy puta hacerle eso a Daniel.
martes, 27 de mayo de 2008
Todo esto se termina
Nada queda
Vuelvo a repetir
Lo mismo que desde hace años
Que desde hace varias vidas
Que desde hace muchos mundos
Nadie me puede decir que no tengo vida interesante
Nadie me puede decir que nunca salí de mi agujero
A lo que le tengo miedo es...
Que lo que dije sea mentira.
sábado, 10 de mayo de 2008
que loco que hace tiempo no toco a otro cuerpo, a otra mujer que me haga sentir bien.
ya hace tiempo me lo vengo diciendo. desde hace tiempo.
las 8 45 de la maniana. yo habria hecho lo mismo sin importar nada. porque me conosco. porque asi soy y asi somos.
me quedo conmigo adentro de mi. me quedo con todo lo que intento salir al mundo para morir.
el orgasmico orgasmo de varias parejas en el hostal. se acabo el coito esta noche. esta maniana de lunes normal.
no se si maniana y no se si despues. a ella no me la imaginaba con alguien que no fuera yo. tantas veces tenerla en esa posicion tan sumisa. tan pidiendome todo. tan comiendome completo y sin gotas de duda despues.
pero ahora ya se, como siempre debio de haber sido, como siempre lo fue, que nadie es de nadie. que ella mucho menos es mia y que nunca lo fue.
domingo, 4 de mayo de 2008
mientras, yo escucho a Art Blakey y los Mensajeros del Jazz hacer jazz en mi nueva pieza y habitacion la primera maniana que me levanto en ella con una pareja de amantes enamorados sin estarlo en la habitacion de al lado...
son las 4 38 pm del tres....cuatro de mayo, y que rapido pasa el tiempo. me acabo de levantar hace diez minutos, sin cruda pero resintiendo la borrachera de anoche y el llegar a casa con el sol y pensando un poco en la francesa hijadeputa que no dejaba de molestar...
jueves, 1 de mayo de 2008
miércoles, 30 de abril de 2008
lunes 28 de abril de 2008
Se va poco a poco el invierno. La primavera llega pero no quiere quedarse aquí más de un día, más de unas horas al día.
Huele a miados la plaza Dos de Mayo. Ayer fui al Prado a ver a Goya en tiempos de guerra, aunque en realidad fui a ver qué me encontraba en esos grandes salones de palacio.
Cómo se olvida, cómo se levanta, cómo se cae y se pasa a otro barco de peces malditos en las calles de la mediana ciudad.
viernes 25 de abril de 2008
De lo azul que es mi mundo
Escucho jazz y te escribo
Para que nunca me olvides, quisiera decir
Para que esté siempre en tu mente y me puedas decir
Con tu boca que extraño y con tus manos para mi otra vez
Con mi boca en ese hueco donde resusita la humanidad
Extraño de ti
Tu compañia sin esperanza que se llevó tan bien con la mia
Tu compañia que hacia mejor y más claro mi día
Porque cómo explicar ese sentimiendo humedo de recuerdos
Cómo explicarte gritando mi nombre al oido
Susurrarme el futuro desde un pasado prohibido
Esa visión espacial de tu espacio y el mio colapsandose en uno
Mojados los dos por el sudor de los dos
Sin compromisos de ningún tipo salvo el de estar con nosotros
En el mismo lugar
Mirandonos, sintiendonos, tocandonos, amandonos
Porque qué es amor si no el pensamiento claro y simpe de un otro solo pensamiento
Asi entiendo yo esta noche
Escuchando jazz y escribiendo
De lo azul que es mi mundo.
martes 22 de abril de 2008
Una vez trabajé repartiendo publicidad para el bar de un fascista en Madrid. Se llamaba “el bar de Colón”. Me habian dicho que el dueño era fascista pero no le di mucha importancia en el momento. Llevaba mes y medio sin trabajar. No le di importancia hasta que trabajé ahi. Mi trabajo consistía en repartir publicidad del bar a la gente que pasaba por Fuencarral, invitandoles una sangría de cortesia. Ese primer y único dia, a medio turno y entrando al bar a tirar una miada me llamó el facha para con él. Me preguntó si yo le habia dado publicidad a un negro. Le dije que sí. Núnca mas hagas eso, me dijo. A ese tipo de gente no la queremos aqui. Y se dio la vuelta para jugar con su hijo que andaba corriendo por el bar, tirandose al piso. Le pedi un vaso con agua a LF, que me habia conseguido el trabajo y que desde hoy trabajaba en la barra. Me dijo sii, ese tipo es un faacha, te lo diije vieejo. Volvi a no darle importancia al asunto pensando que no tenia trabajo y que esto era mejor que nada. Me acabé el agua y volvi a salir al frio cerca de las doce de la noche. Saliendo de “el bar de Colón” salieron de un bar vecino tres "cazadores" invitando tragos a la gente que pasaba por la misma esquina en donde yo estaba. Menos de una hora pasé en la esquina pensando si conservar el trabajo y hacerme a la idea, o irme a la chingada lo mas rápido posible. Decidi por lo ultimo. Entré al bar, le dije a LF lo que pensaba, le pedi una disculpa por quedarle mal a él, por la recomendacion, y volvi a salir al frio cerca de la una de la mañana, pensando en conseguir otro trabajo.
domingo 20 de abril de 2008
Llegué a la fiesta todavia de pie por las cinco lineas de coca que me habia dado antes de llegar. Sin ellas los litros de cerveza y vasos de whiskey me hubieran tumbado mucho antes. Vi a la tipa que me había invitado. Trabajaba con ella dos días a la semana. Nos sentamos a platicar en unas escaleras tomando hawaian punch con brandy. Me invito a su cuarto y cerró la puerta. Alguien la intentó abrir pero no pudo. Luego ella salio a decirle al tipo que no estuviera chingando y que disfrutara de la fiesta. Yo me sente en la cama y puse mi vaso de hawaian punch en una mesa. Ella se sento en mis piernas viendo hacia mi y se agarró de mis hombros. La tomé por la espalda y nos besamos. No nos besamos mucho y nos quitamos la ropa. Ella estaba mojada desde antes de quitarle los calzones. Yo la traia bien parada y me la empezó a mamar mientras yo me quitaba la camiseta. Era muy flaca. Parecia un niño con su pelo corto y su falta de tetas y culo. No me importa. Dejó de mamarmela y se volvió a sentar sobre mis piernas viendome. Con su mano me metio en ella. Me dejé caer hacia atrás. Ella andaba en hongo y gritaba. Cambiamos de posición. Se la metía por el culo. Yo andaba bien perico y la agarraba por la cintura viendo la curvatura de su espalda. Ella andaba en hongo y gritaba. Estiraba su mano para arañarme la panza y aveces jugaba con mis huevos por debajo. Cambiamos de posición. Ella estaba arriba. Pegaba unos sentones mientras apoyaba sus manos en mis hombros y daba chillidos agudos. Yo le agarraba las piernas y el culo viendo como entraba y salia de ella mientras nuestros pelos se encontraban a medio camino. La ultima vez que la vi me invito a su casa a tomar cerveza. Le dije que no y fui a ver a Ellen.
sábado 19 de abril de 2008
Entonces me servi otro vaso de cerveza
Escuchaba Radiohead en la sala del piso de una amiga que habia conocido un dia e imaginado tres años antes de volverla a ver.
Estaba en Madrid otra vez
En eso que llama la gente Europa sin saber a dónde iba
Estaba donde estoy en este momento escribiendo escuchando a Radiohead tomando otro vaso de cerveza
Me llena la ansiedad cuando estoy solo y cuando estoy acompañado
Estuve viendo hoy artículos sobre la paranoia
No soy clinicamente paranóico
Creo yo que solo un poco
Toda la mañana estuvo de lluvia
Toda la tarde estuvo frío
Toda la noche estuve solo
No hay finales en las historias
Y mis historias son solo postales
No creo que el mundo es de los pobres
Creo que el mundo no es de nadie
Creo que no es casualidad
Creo que no es algo pensado con anticipación
Creo que las cosas solo pasan
Y que como todas las cosas yo tambien ando de paso
(Vente a estar de paso aqui conmigo)
miércoles 16 de abril de 2008
Llevo rato pensando en el espacio y el tiempo aqui en Madrid. Tiempo pensando en el tiempo, en la Quantum Theory de Mantra y en la poca que me se de Einstein.
Fué en el verano del 2005 cuando estuve aqui mi primera tarde de Madrid. Cuando me invitó a tomar cervezas Jose Luis, aquel viejo de sesenta años con ganas de tomar con gente nueva y que me dijo donde estaban las principales cosas a saber en Madrid, Centro.
Mi primer guía en esta ciudad y en España.
Pero yo hablaba de la Quantum Theory, y bueno, Jose Luis entra en el escrito porque en esta barra de bar, en este bar (por supuesto), el tiempo no se detuvo para nada. Y la mesera es otra, y yo soy otro, y Jose Luis no está, y la cerveza también es otra.
Me han venido mucho y muy seguido esos sentimientos Sartreros de la Nausea. Ese sentir que el mundo cae sobre tu pecho y no se mueve de ahi.
Vengo de una gran libreria en donde vi fotos y hojié libros de antropología, sacando tres títulos de la pila que me llamaron más la atención.
(Joder!, que miedoso perro vive en esta plaza en donde estoy sentado. Le hace falta reirse más de si mismo, lo más probable).
¿Cómo volver a ver todo con instinto
y no con los ojos tristes que ven todo hoy?
¿Cómo mirar a la gente otra vez a los ojos
y perderse en el inmenso mar de la mirada humana
y no pensar que es charco y salirse sin tocarlo?
¿Cómo aceptar ser hoy como era antes?
¿Cómo volver a sonreir honestamente con las risas de los niños?,
me preguntaba una tarde de primavera pensando en el invierno.
martes 15 de abril de 2008
Oh! Babylon, start your crafty hefty work
Don’t mind me
I’m just a pawn dressed in skin shirts
Nothing more nothing less
Get up and stand up and fight the rowdy current
To the top of that magical hill that lets us in deep waters
After the sun does its round ‘round the earth.
Help me Babylon
I don’t care if it’s you that lets me put on a coat
As long as it’s cold outside home I don't mind
Fuck the rest
And don’t rest until the whole world is you and you are the whole world
Because it doesn’t matter in the end
The end doesn't care just like me
Because if you are the whole
Babylon you are gone.
La gente cuando se siente escuchada deja de hablar. Cuando se siente escuchada críticamente deja de hablar. Tal vez por un cierto miedo, tal vez porque no sé y núnca voy a saber. A mi lo que me gustaría ver es a mi mismo en un video pasado de verga de pedo sin saber que estaba ahi y verme estando. Algo así como un sueño real y verídico del que no me acuerdo. Eso serviría para probar en cierta manera que la memoria es independiente de los hechos. O más bien, que los hechos son independientes de la memoria. Es decir, que cosas han pasado, contigo, sobre ti, que no son ciertas, o que son ciertas, cosa que hace al cuento más confuso.
La gente deja de hablar cuando cuenta intimidades, o más bien cuando no cuenta superficialidades y un extraño escucha. Y hay algunas personas que no se dan cuenta de la gente, y hay otras que son un poco más sabias y no le hacen caso a la gente. (Esto es sin importar como se vean o que tipo de vestido estén portando).
Por esto los bartenders tienen que desarrollar una habilidad especial y específica en cuanto a las conversaciones de la gente. Tienen que tener esa sutil manera de escuchar sin escuchar y hacerlo lo suficientemente bien como para opinar algo sobre el tema, esto es al menos no quedarse callado si la persona que platica una historia pregunta algo, y a la vez no decir algo de más si la persona conversante no necesita la otra parte de la respuesta.
Algo muy dificil es empezar conversación. Se me sigue haciendo dificil despues de todo y despues de tantos bares y lugares y ciudades y paises y lenguajes.
Una pretty woman de pantalon verde, botas altas, y saco negro pasa, la veo, ve un aparador de zapatos y se va, pasando por el avandonado local de un BBVA. Un telefono celular tiene el timbre del silvido de Kill Bill, una muchacha madre escucha como su amiga le dice en broma a su ninia de dos anios que la van a robar cuando la ninia empieza a correr y a alejarse un poco. La palomilla de ninios pre-pubertos y pubertos comandada por un ninio de color obscuro con gorra roja se recarga en la misma pequenia barda de colores del area de juegos infantiles al lado de las senioras de pelo blanco. El sol se va llendo de la plaza y solo los edificios del este en los segundos pisos (que aqui son primeros) toman sol ahora.
Ya se fueron todos los caballos de regreso a la comandancia y de regreso a los establos. Yo no encontre cuarto y dos seniores libaneses con trompeta y saxofon platican en una banca y fuman un cigarrillo, mientras un muchacho con pantalon negro deslavado, sudadera gris rata, gorra y lentes obscuros se levanta de una banca, va y compra un cortaunias en una tienda de chinos y se va a donde duerme caminando por las calles de la gran ciudad sabiendo que no es casa.
El sentimiento de sentirse azul. Tengo algo hecho tanto nudo en el pecho que aveces se me quiebra la voz y soy incapaz de decir cualquier cosa. Siento, y este es un "siento" diferente y ajeno a mi, que tengo algo importante que decir y ni yo se que es ni a quien se lo debo decir. No es que soy puto, porque lo he pensado y sentido, no lo soy. No es que amo a mi madre y amo y odio a mi padre al mismo tiempo. No es que no soy de la calle y que no soy de nadie. No es que no tengo pasion alguna o que soy un narcisista de mierda enclosetado, aunque tal vez sean todos estas cosas y me falta aclarar eso conmigo mismo y con la gente. Entonces me encuentro aveces en posiciones de total estado filosofico segun yo--existencial o contemplativo--en el que me quedo callado completamente por ese nudo de que hablaba al principio.
Por lo pronto una trompeta de hace ochenta anios suena como si estuviera sonando ahora en este Madrid nublado, gris y frio.
Europa...Aqui estoy otra vez y las cosas son diferentes y a la vez no. Se escucha musica similar y la gente se viste parecido. Me mola, me choca, me gusta, me odio, me amo...filosofia fame-for-vanity en mi vida y yo no aceptandola en mi mente.
El Jazz como lo que es y lo que escribo. Fantasmas de MANTRA. Errores mios de mirar y no mirar a la gente. Hacerla sentir incomoda. Tal vez e ironicamente, es ella quien me pone incomodo a mi: una paranoia que empieza y termina conmigo.
Tengo suenio y no tengo ganas de salir. Estoy cansado...de mucho...del todo que es todo lo poco que me ha pasado ultimamente de sentimientos diferentes. El mismo sentimiento de vacio sin tocar fondo y siempre cayendo. Como Alicia...la dulce Alicia que no regresara.
Soft Jazz de elevador para dar suenio en un mundo mio en el que dormir es digital y dificil de lograr.
Jazz de Stuttgard en el que intente irme sin pagar.
"Te gusta el jazz o te gusta le gente?" "You always hurt the one you love".
Pregunte que tal va un bar economicamente y me dijeron que no pusiera uno. Que ya hay muchos y que no deja dinero.
Pense que llovia.
Sonie que lloraba.
Que ilumina a los barcos
Que se escapan de la noche
En la mañana de San Diego
Juro que no soy poeta
Los edificios siempre han estado ahi
Ese mar sigue siendo el mismo
Y aunque este es otro
El avión se siente tan conocido
Que siento un miedo familiar estando en él
Espero que el tiempo me tome
Y que yo me tome al tiempo
Que me tome una cerveza
Y que todo esté bien sin esconderme
En esas noches de misterio existencial
No le tengo miedo al destino
No le saco les digo
Me gusta verlo y que me vea
Sentir la verga de la vida
Y que ella tambien sienta la mía
Me gusta ver al sol naciendo
Y a un avión
Conmigo dentro
Despegando
El aire como destino
Inmediato
El viaje como respuesta al presente
Como puerta al futuro
Como solución al pasado
No me despido
Pero sí me despido
Porque cada que escribo
Se va algo de mí
Algo mío
Sin importar el café
Sin importar la cocaína
O el sol
Que empieza
Y ¿por que no?
Que termina
Esta mañana
De neblina
En este avión
Y desde esta ventana
Que ve todo
(Y que ve nada)
Desde arriba
--¿Entonces, si no me quieres a mi, por qué has venido?
--Ando buscando. Sigo buscando.
--¿Qué estás buscando?
--La felicidad.
(Silencio)
--¿Y crees que te la vas a encontrar paseando por ahi en la calle? ¿Crees que es así de fácil?
--No. De hecho creo que no la voy a encontrar.
(Silencio)
(Se besan)
Final alterno:
(Se matan)